Además de los químicos usados para potenciar la producción, la contaminación biológica constituye otra amenaza para la inocuidad de los alimentos de origen agropecuario. La falta de control en producciones agrícolas de ratones, perros, gatos y gallinas pone en riesgo de transmitir enfermedades como toxoplasmosis, salmonella y otras. El país ha logrado notables éxitos en la producción orgánica de cacao, café y banano para los mercados europeo y norteamericano, pero no existe igual rigor para los productos que van al mercado local.
Además de los químicos usados para potenciar la producción, la contaminación biológica constituye otra amenaza a la inocuidad de los alimentos de origen agropecuario.
La falta de control de ratones, perros, gatos y gallinas en producciones agrícolas pone en riesgo de transmitir enfermedades como toxoplasmosis, salmonella y otras.
El país ha logrado notables éxitos en la producción orgánica de cacao, café y banano e insertarse en mercados exigentes como el europeo y norteamericano. Sin embargo no existe igual rigurosidad para los productos que van al mercado local.
Raúl Peralta, encargado del Departamento de Inocuidad de la secretaría de Agricultura, cree que el país avanza en calidad alimentaria, pues recientemente inauguró el Laboratorio Veterinario Central para evaluar los restos de plaguicidas y otras sustancias en los productos del agro.
Además cita que ya se ha elaborado el reglamento de certificación de las Buenas Prácticas Alimentarias, que es la garantía para adquirir productos de buena calidad.
Peralta señala que aunque en el país no existen estudios científicos que asocien los agroquímicos y los daños en la salud, la cantidad de cánceres y otras enfermedades que proliferan llama la atención.
Precisamente, la publicación Beyond Pesticides del 29 de septiembre pasado refiere un estudio llevado a cabo por el Centro de Cáncer del Norte de California (NCCC por su sigla en inglés), que revela que los niños expuestos a agrotóxicos agrícolas aplicados cerca de su hogar tienen dos veces más el riesgo de desarrollar leucemia linfoblástica.
El estudio llevado adelante por Rudolph Rull, Ph.D., demostró un riesgo elevado de contraer la enfermedad, asociado con la exposición moderada a agrotóxicos clasificados como organofosforados, herbicidas clorofenólicos y triazinas y con agrotóxicos usados como insecticidas o fumigantes.
Monitoreo. Para la Fundación Agricultura y Medio Ambiente (Fama), entidad que representa en el país la Red de Acción en Plaguicidas y sus Alternativas en América Latina, se necesita conocer los niveles de intoxicaciones que pueden existir en poblaciones y trabajadores agrícolas.
Gustavo Gandhini, presidente de Fama, señala que solo se registran las intoxicaciones por plaguicidas cuando se dan suicidios, por lo que hay estadísticas que se pierden.
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Afipa
La Asociación de Fabricantes y Representante e Importadores de Productos para la Protección de Cultivos (Afipa) considera que se ha avanzado en las buenas prácticas agrícolas, ya que cada día el consumidor es más exigentes, así como los organismos que rigen el comercio mundial.
Se rigen con el código
Luis Pelletier, director ejecutivo de la entidad, dijo que en el país los productores agrícolas se rigen con el código de conducta establecido por el Fondo de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) y han avanzado hacia una agricultura más sostenible con el uso de químicos más favorables al ambiente. Para esto, dijo, se capacitan continuamente.
Por: Odalis Mejia
Hoy Digital