Una nueva cementera: Crónica de la Vista Pública en Boca Chica.

Por Domingo Abréu C.

En la tarde del 9 de noviembre, 2010, se celebró en el Batey Gautier,
Los Llanos, San Pedro de Macorís, pero muy cerca de Boca Chica, una
vista pública para conocer la propuesta del grupo Acero Estrella para
construir en ese sitio una industria (Primera Interrogante).

Durante el desarrollo de la actividad la arquitecta Luisa Morales,
gerente administrativa de Acero Estrella, se lamentó de que no
estuvieran allá representantes de los movimientos ambientalistas y
sociales (Segunda Interrogante).

La primera intervención de parte de la comunidad fue señalar que se
trata del mismo proyecto que fue rechazado por las comunidades de
Gonzalo, Los Haitises (Tercera Interrogante).

Ramón Colombo, encargado de comunicaciones del Proyecto, lamentó que
el proyecto de la cementera en Gonzalo no hubiera comenzado como ha
comenzado este proyecto en Gautier (Cuarta Interrogante).

Comencemos con la Primera Interrogante. ¿Qué tipo de industria?

Lo primero es que la empresa del Grupo Estrella se llama ahora
«Consorcio de Inversiones Panamericanas» y no «Consorcio Minero
Dominicano», como se llamaba el proyecto para Los Haitises.

Según la información colocada a la entrada del Multiuso de Gautier,
donde se celebró la vista pública, el proyecto consiste en una «Planta
de Molienda de Clinker», no una cementera, según insistieron los
presentadores del proyecto en Gautier. Pero ya en el desarrollo de la
exposición, y en el texto distribuido entre algunos de los asistentes,
dice lo siguiente: * «Construcción de una planta de producción y
despacho de cemento utilizando clinker importado y yeso producido en
Barahona. * «La capacidad será de 360,000 toneladas de cemento
anuales».

La interrogante alterna es: ¿porqué no se explica de entrada que se
trata de una cementera? ¿porqué se coloca otro propósito y no el
propósito real?

Creemos que pesa demasiado ambientalmente lo sucedido en Los Haitises,
por lo que los propulsores del proyecto: el Grupo Estrella y
asociados, han preferido cambiar algunas cosas: nombre de la empresa,
nombre del propósito y estrategia de relaciones sociales.

La Segunda Interrogante. ¿Porqué no estaban allá representantes
ambientalistas y de los grupos sociales?

Aunque la arquitecta Luisa Morales esperaba -según sus palabras- la
presencia de un mayor número de organizaciones representantes del
movimiento ambientalista dominicano y de los grupos juveniles que
adversaron la construcción de la cementera en Los Haitises, solamente
estuvieron representantes de la Asamblea Nacional Ambiental -ANA- y
del Espeleogrupo de Santo Domingo. Según sus propias palabras, tenía
entendido que se había extendido una invitación tanto para el
movimiento ambiental como al movimiento juvenil y social. Cuando le
preguntamos a Ramón Colombo sobre dicha invitación, nos dijo que, al
parecer, la encargada de esa parte había entendido que la invitación
era solamente para la comunidad de Gautier.

La interrogante alterna es: ¿Si de parte de la Gerente Administrativa:
Luisa Morales, estuvo la disposición de invitar a representantes de
ambos movimientos, cómo es que nadie se enteró, salvo por una
información indirecta, casi filtrada, ya en la noche del día 8 de
noviembre?

Creemos no hubo una decisión clara, definitiva y verdadera para que
representantes ambientalistas estuvieran en la actividad. Sim embargo,
aceptemos la explicación de Ramón Colombo. Es posible que se haya
pensado que la actividad era solamente para los habitantes de Gautier.

La Tercera Interrogante. ¿Porqué existe el temor en la población
dominicana de que se repita la situación de Los Haitises?

La primera intervención de un miembro de la comunidad de Gautier llamó
la atención a que el proyecto que ahora se lleva a Gautier es el mismo
proyecto que fue rechazado en Los Haitises por las amenazas que
significa la presencia de una cementera sobre un acuífero de
importancia. Y es que, como dijo la persona que expuso primero en el
orden de intervenciones, también bajo la superficie de Gautier se
deslizan aguas subterráneas que alimentan el río Brujuelas, que además
son aguas que alimentan el complejo hídrico de tomas de agua
Casuí/Brujuelas, que a su vez alimentan acueductos de Santo Domingo
Este e incluso del Distrito Nacional.

La interrogante alterna es: ¿Podrá manejarse la empresa «Consorcio de
Inversiones Panamericanas» con nuevas estrategias y convencer a la
población de Gautier y a la población dominicana de que sus
intenciones son desarrollar un proyecto que respete el ambiente y los
recursos frágiles de Gautier?

Creemos que tienen todas las posibilidades para convencer, pues aparte
de que encabeza su equipo de comunicaciones un veterano de la
comunicación como Ramón Colombo, tienen las experiencias obtenidas en
Gonzalo (Los Haitises), y deben saber que lo aprendido por los
dominicanos en Los Haitises les ha dotado de una especie de noción
nacional previsora ante proyectos similares. Por ello, creemos también
que lo mejor que pueden hacer es explicarle a la población, en
presencia de representantes del movimiento ambientalista, y en un
encuentro amplio con la prensa, los objetivos de su «Proyecto Molienda
de Clinker», y así podemos comenzar todos con todas las cartas sobre
la mesa… y boca arriba.

La Cuarta Interrogante. Por lo dicho por Ramón Colombo ¿Se hubiera
construido la cementera en Los Haitises si se hubiera comenzado como
se está haciendo en Gautier?

Quizás no fue esa su intención. Pero nos pareció que la opinión de
Ramón Colombo al hablar sobre las intenciones del «Consorcio de
Inversiones Panamericanas» es que hubiera sido posible la construcción
de la cementera del «Consorcio Minero Dominicano» en Los Haitises.
Colombo declaró en la actividad que lo que pasó en Los Haitises es que
el Grupo Estrella comenzó al revés, sin reunirse primero con las
comunidades de Gonzalo, Pilancón, Sabana de Tío Filín, Carmona, Las
Tres Cruces y otras. Pero que aquí, en Gautier, el Grupo Estrella ha
comenzado bien, reuniéndose con las comunidades (hasta ahora han
habido reuniones en Los Llanos y Gautier). Creíamos que la opinión
técnica de las organizaciones que nos opusimos al establecimiento de
una cementera en Los Haitises, más la opinión del PNUD, habían sido
suficientemente técnicas, suficientemente científicas y
suficientemente claras, como para saber que bajo ningún concepto era
admisible una cementera en Los Haitises.

Colombo expuso además que ahora, en Gautier, y con el proyecto del
«Consorcio de Inversiones Panamericanas», la comunidad tendrá
acueducto, canchas de baloncesto, canchas de volley-ball, un estadio
para beisbol, mejoras del Centro Comunal, inversión en el área de
salud, inversión en el desarrollo cooperativo, ampliación de la
escuela abierta con la participación del Infotep, del Idac, empleos
(más de 500, según lo expuesto)

La interrogante alterna es: ¿Esas promesas hubieran convencido al
movimiento ambientalista, al movimiento juvenil y social y a la
opinión científica nacional e internacional de la bondad de contruir
una cementera en Los Haitises?

No lo creemos. Y pienso que para este nuevo caso, en que se trata
ahora de una cementera seca, sin uso de agua, que no hará extracciones
en la zona, que no tendrá vertidos sino que reciclará sus desechos,
que no sacará agua del subsuelo, que no verterá agua al acuífero
Brujuelas, que estará totalmente cubierta de techos y mangas para
evitar que salga el polvo, que reforestará «masivamente» en su
entorno, etc. etc., lo mejor es que desde ya toda esa información se
ponga a disposición de técnicos y organizaciones, comenzando con el
folleto distribuido hoy (noviembre 9) en la vista pública de Gautier,
colocarla en los medios, en los foros y en físico donde pueda
obtenerse.

Una última cosa. En la zona existen proyectos ambientalmente sanos y
en funcionamiento, como el de las plantaciones de caña orgánicas para
la producción de azúcar orgánico y otros productos de importante
demanda en Europa, de gran futuro económico para la zona.

Personalmente, y creo que mi organización (ANA) lo comparte, un
proyecto respetuoso del ambiente y de otros proyectos sanos de la
zona, sin importar que sea una cementera, sería bienvenido por todo el
movimiento ambientalista, siempre y cuando cumpla con los estándares
previstos. Veamos si el «Consorcio de Inversiones Panamericanas» puede
demostrarnos eso ahora.

Domingo Abreu Collado.