Tomar una taza de café humeante y aromático va a ser a partir de ahora no sólo un placer para quien la degusta, sino también una acción beneficiosa para el medio ambiente, gracias al reciclado de la borra.
La Asociación Argentina de Marcas y Franquicias (AAMF) ha puesto en marcha un programa de recolección y aprovechamiento de la borra de café con la adhesión de nueve de sus asociados, grandes cadenas de cafeterías.
Desde la puesta en marcha de la iniciativa, hace unos diez meses, ya se han logrado recolectar 19,000 kilos de borra de café que antes simplemente se desechaban junto al resto de los residuos generados en las cafeterías.
“Esto es parte de nuestros programas de responsabilidad social empresaria. Muchos de nuestros socios son cadenas de cafeterías y les propusimos sumarse a un programa con compromiso social”, dijo a Efe Lucas Secades, director ejecutivo de la AAMF.
Para producir una taza de café se utilizan entre ocho y diez gramos de granos molidos que, una vez hecha la infusión, son simplemente un desecho. Gracias a esta iniciativa, esa borra destinada a ser basura se convierte en humus en un proceso con varios eslabones.
Valor del reciclaje a gran escala
Según la AAMF, los argentinos tiran 14 millones de toneladas de basura por año y un 50% de esos residuos son “húmedos”, es decir, con un gran componente orgánico que podría aprovecharse para hacer compost, como es el caso de la borra de café.
El reciclado en empresas e industrias es clave para amortiguar el impacto sobre el ambiente, ahorrar costes y generar nuevos “empleos verdes”, objetivos que bien valen un brindis con una buena taza de café.
Vía: Listín Diario