Entre Restauración y Pedro Santana hay una carretera sin asfaltar que se pierde en un imponente sistema montañoso, de grandes precipicios, que forma parte de la Cordillera Central. Sus 48.3 kilómetros delimitan la frontera entre Haití y República Dominicana, en medio de un trayecto con pocas viviendas y tramos deforestados. Es la Carretera Internacional, una vía solitaria y deteriorada, conocida por una peculiaridad: los niños haitianos que corren con ímpetu tras los pocos vehículos que pasan para pedir dinero o comida a los pasajeros.
Leer Mascanliruletsiteleri.net betgaranti canlı slot siteleri kaçak iddaa
porno sohbet sex numaraları sex hattı sohbet hattı erotik sohbet