Sequía deja panorama desolador productores línea noroeste

Montecristi.- La sequía deja un panorama desolador a miles de productores agrícolas y ganaderos en las cuatro provincias que integran la línea noroeste.

En comunidades como Guayubín y Santiago Rodríguez, parte del ganado comienzan a morir por la falta de agua. En otras comunidades, las vacas y las ovejas logran sobrevivir comiendo tierra, debido a que el largo tiempo sin lluvia ha secado la hierba.

Los más afectados por la sequía son los productores de arroz quienes estiman pérdidas por más de 300 millones de pesos.

Tan solo en el municipio de Castañuela de la provincia San Fernando de Montecristi, mil 200 productores del cereal se han visto afectados. La falta de lluvia ha dejado las plantaciones agrietadas y ya algunos han decidido abandonar sus plantaciones.

Rafael Reyes, tenía 570 tareas sembradas de arroz en Castañuela Arriba. De esa cantidad solo 80 tareas pudieron ser recogidas. “El año pasado me fue muy bien, peor con la sequía, en este año llevo más de un millón de pesos perdidos”, expresa Reyes al hablar con reporteros de El Caribe.  En la misma situación se encuentra Serafín González, quien estima en dos millones las pérdidas.

Mientras que el productor Justino cabrera ha visto quemarse con la sequía, las cinco mil tareas que tenía sembrada de arroz.

 Solo aquellos que están afiliados a la junta de regantes Fernando Valerio y que pudieron conseguir que una cooperativa o el Banco Agrícola los asegurara, sienten hoy cierto alivio y las pérdidas económicas son menores.

Aunque con las lluvias registradas el pasado domingo, los canales de riego y el río Yaque del Norte lograron aumentar su cauce, esto no ha sido suficiente para enfrentar los graves daños causados por la falta de agua.

Serafín González, dijo que en las comunidades como las Matas de Santa Cruz, Palo Verde y Valle Vásquez, los productores agrícolas han quedado en prácticamente en banca rota.

Aunque en menor proporción, los productores de banano también han enfrentado problemas al no contar con el agua suficiente para irrigarlas.

Actualmente, las autoridades que manejan los embalses Tavera- Bao que sirve para alimentar los canales de riego de la línea noroeste, apenas sueltan diez metros cúbicos para la producción agrícola, el otro cinco por ciento, es utilizado para el consumo humano en las comunidades de Moca y Santiago.

 Algunos productores de banano de Mao, se quejan de cierto privilegio en el manejo del agua. Dicen que mientras a ellos le ofrecen apenas gotas, la mayor cantidad la destina para el proyecto la Cruz de Manzanillo, ubicado entre Montecristi y Dajabón.

Por: Miguel Ponce