Por: Jorge González
A pesar de la disposición del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, que prohíbe todas las actividades de extracción de agregados del río Haina, no se observa ningún tipo de vigilancia militar ni policial, ni forestal, por lo cual dicha disposición será acatada solo por quien quiera hacerlo.
En las proximidades de la comunidad Hato Nuevo, en la provincia Santo Domingo, pequeños grupos de hombres, denominados “hombres hormigas”, siguen trabajando sin importarles la medida de Medio Ambiente. Estos hombres trabajan formando montículos de arena que venderán a pequeños camiones volteos, que son llenados pala a pala, y debido a esto su detención se hace difícil.
La combinación de la extracción indiscriminada de arena, grava y gravilla, la deforestación de sus alrededores y la sequía están contribuyendo día a día a la muerte inminente de este importante río. Solo hasta ahora, cuando ya el caudal agoniza, las autoridades tomaron en cuenta la preocupante situación.
“Medio Ambiente es la causante de lo que ha pasado aquí. Ya que con los permisos que ellos dieron hace años, hasta hace tres días había cuatro máquinas retroexcavadoras llenando camiones volteos a toda hora, todos los días”, según Antonio Peña, uno de los denominados hombres hormigas.
Según la disposición del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, quedan suspendidas todas las actividades de extracción de agregado y de canalización en el cauce del río, con énfasis en las proximidades de la comunidad Hato Nuevo, provincia Santo Domingo. El comunicado fue firmado por el viceministro de Suelos y Aguas, José Alarcón Mella.
Agregados JP, Industrial Marketing, Constructora Xamix, Grancera La Pared y Roika Portorreal, son las cinco empresas que fueron comunicadas por las autoridades de Medio Ambiente, sobre la medida que prohíbe las actividades de extracción de agregados en el citado acuífero.
“Mire fotógrafo aquí ahora sacan los materiales de noche”, vociferó una señora que pasaba en una yipeta.
En un recorrido de aproximadamente un kilómetro por el referido río, se pueden observar las huellas de la depredación de las máquinas pesadas, que hasta han creado caminos para poder acceder y sacar los materiales. Una retroexcavadora y un camión volteo lucen abandonados en una parte alta de la rivera de río.
A causa de la depredación por parte de las granceras, el río Haina en esta localidad de Hato Nuevo ha perdido su atractivo como balneario, lo que ha originado una escasez de clientes para las familias que viven de las ventas de alimentos en los alrededores del río.