Antes que prestar atención, el poder se ha decantado por desacreditar a los más sinceros y fervientes defensores de la biodiversidad, como son los grupos ecologistas.
Sin ellos, aunque en ocasiones su celo raye en lo excesivo, tal vez el cambio climático y otros fenómenos no fueran hoy una real preocupación a nivel planetario.
Pues bien, uno de esos grupos que opera en República Dominicana, el Jaragua, ha sonado la alarma sobre la deforestación en la región Sur, a pesar de toda la alharaca de las autoridades de Medio Ambiente y Recursos Naturales.
De acuerdo con la bióloga Yolanda León, su directora ejecutiva, en la zona solo queda el 10% de los bosques húmedos.
Parques nacionales como la Sierra de Baoruco, considerado hábitat de cientos de especies endémicas, así como la mayor fuente de ríos de La Española, son víctimas de la deforestación.
La insensibilidad y la falta de autoridad han llegado a tal extremo que según la investigadora dominicanos se han apropiado de franjas del parque, que ceden a haitianos para la agricultura a cambio de una quinta parte o el 20% de la cosecha.
O sea, que en torno a las áreas protegidas también opera un gran negocio. Cabe esperar que las autoridades asimilen la revelación como un aporte y no como una denuncia para empañar imágenes.
Fuente ElNacional.com.do