La principal causa de que las personas destruyan los recursos naturales en República Dominicana, especialmente en la región Enriquillo, es la pobreza, consideró el sacerdote Antonio Fernández coordinador de la Pastoral Ecológica y Medio Ambiente de la diócesis de Barahona.
Explicó que la gente va las montañas a talar árboles para la preparación de conucos para conseguir rápido lo que se logra a largo plazo, usando medios de conservación de los suelos.
Dijo que esta práctica se realiza especialmente en primavera para el cultivo de habichuelas, ñame, yautía, entre otros frutos de ciclo corto, lo que provoca que cuando llueve la tierra fértil sea arrastrada al mar Caribe. «Al quitar la cubierta vegetal de la tierra, esta se empobrece, se calientan las montañas y se afecta el régimen de lluvia», expresó.
El sacerdote significó que esto provoca que los vientos alisios que vienen del mar se enfríen al chocar con las montañas que al estar caliente por la falta de árboles que son los que producen oxígeno y mantienen frescas esas zonas, además, que llueva menos y se presenten prolongadas sequías.
«Entonces, cuando aparecen fenómenos atmosféricos, las torrenciales lluvias afectan y erosionan las montañas, y causan daños a los puentes, acueductos, carreteras, entre otras infraestructuras», dijo el sacerdote en el acto de celebración del Día Mundial de la Tierra, que fue organizado por el Ministerio de Medio Ambiente y la Pastoral Ecológica y Medio Ambiente de la Diócesis de Barahona.
Para el religioso hay que concientizar a los agricultores y a los dueños de grandes fincas para que los haitianos que ponen a trabajar los instruyan sobre los peligros que representan los fuegos para los recursos naturales.
Por: Teuddy A. Sánchez
El Nacional