Por: Marvin del Cid
En las últimas semanas el tema de la conservación y protección de las reservas naturales ha tomado mucha importancia por el litigio de los terrenos en Bahía de las Águilas.
Ambientalistas, conservacionistas, ecologistas y grandes sectores de la población han tomado como propia la lucha contra la destrucción de los ecosistemas, en especial de la región que comprende el suroeste del país. Esto es aplaudible, más cuando se defiende parte de uno de los patrimonios naturales más importantes del país, la Reserva de la Biósfera Jaragua-Bahoruco-Enriquillo. Incluso el Presidente Danilo Medina en su discurso de este 27 de febrero anunció que va a reforzar la vigilancia en los parques nacionales:
«Ahora quiero referirme también, a una iniciativa del Ministerio de Medio Ambiente, que está reverdeciendo nuestro país. Solo en lo que va de gestión, se han plantado en el país 5 millones 885 mil 998 plantas. Es decir, casi seis millones de nuevos árboles se sumarán a nuestros bosques, priorizando las cuencas de los ríos Yuna y Yaque del Sur, por su importancia para la producción agrícola, energética y de agua para el consumo humano.
Además, en estos seis meses se ha dotado de centros de protección y vigilancia a 5 parques nacionales adicionales, y para el final de 2013 está prevista la finalización de 12 nuevos Centros, para igual número de Áreas Protegidas.»
Ojalá que Bahía de las Águilas no se toque nunca y se proteja por todos los medios, pero recordemos que esta hermosa Bahía no lo es todo, hay tantos lugares en esta biósfera igual o hasta más frágiles. Recordemos que el Parque Nacional Jaragua se une al Norte con el Parque Nacional Sierra de Bahoruco y por el Este llega hasta el pueblo de Juancho abrazando la Laguna de Oviedo. RECORDEMOS que las reservas naturales, en Pedernales ocupan el 48% de la provincia.
Bahía de las Águilas es el estandarte de la lucha, ¿pero qué pasa en el patio trasero?
En la siguiente imagen interactiva podemos ver la parte norte del Parque Nacional Jaragua visto desde el mirador del Parque Nacional Sierra de Bahoruco próximo a Las Mercedes. Se pueden apreciar conucos ilegales más evidentes señalados con flechas rojas. (Usar las herramintas bajo la imagen para navegar en ella).
En esta imagen podemos ver el cáncer que está poco a poco acabando con la reserva, víctima de la actividad humana, conucos antiguos y recientes, conucos de haitianos y dominicanos que van dejando horadada de cicatrices la tierra, derribando el hogar de los dos únicos mamíferos endémicos de la isla, el Solenodonte y la Hutía, además de otras especies.
Y si seguimos un poco más al Norte, dentro del Parque Nacional Sierra de Bahoruco, la destrucción es aún más evidente. Cientos de haitianos y algunos dominicanos han hecho de los parques su tierra de cultivo. Muchos de los haitianos trabajan para patrones dominicanos.
El siguiente video podemos ver cómo el Parque está siendo depredado por agricultores. Nos acompaña en el mismo Nicolás Corona, destacado conservacionista y biólogo de campo residente en Pedernales.
Son tantos los invasores que se pueden encontrar por todos lados, sin ningún tipo de control. Gran parte de las tomas en este video fueron hechas a pocos metros de la carretera, los «ocupantes» del parque hablan sin miedo a ser expulsados o procesados por sus actividades.
También hay que resaltar que existen unos pocos, de aquellos que eran habitantes de la Sierra antes de que fuera parque, a los que por ley les corresponde que sus tierras sean compradas para ser reubicados en otro lado. Así, encontramos a un hombre mayor que vive en la Sierra desde la década de los 60 y espera todavía que el Gobierno le retribuya su espacio para salir.
Este área protegida cuenta con más de 33 especies vegetales endémicas y otras 61 especies endémicas de la Hispaniola, con un total de 94 especies endémicas, de acuerdo con el Ministerio de Medio Ambiente.
Las fotos hablan por sí mismas:
Hay más preguntas que respuestas, no entendemos por qué pasa en nuestras narices y nadie hace nada… aunque la ley es más que clara la discusión queda abierta.
Ley No. 202-04
Ley Sectorial del Áreas Protegidas
Artículo 33. Las áreas protegidas son patrimonio inalienable del Estado y, en tal virtud, nadie pude usufructuarlas o disponer de ellas si no es de acuerdo con lo establecido en esta Ley Sectorial de Áreas Protegidas, sus reglamentos y normas, así como las disposiciones vigentes en la Ley General sobre Medio Ambiente y Recursos Naturales No. 64-00, del 18 de agosto del 2000.
La Reserva de la Biosfera Jaragua-Bahoruco-Enriquillo
La Reserva está ubicada en el Suroeste de la República Dominicana, en la denominada Región Enriquillo. Posee un área total de 4,858 km² que incluye de zonas núcleo de 3,184 km² y 900 km² de áreas marinas. Las zonas núcleo son los Parques Nacionales: Jaragua (establecido en 1983), Sierra de Bahoruco y Lago Enriquillo e Isla Cabritos (establecidos en 1974). Después de la declaración de la Reserva, se crearon por decreto presidencial dos áreas protegidas que incluyen terrenos dentro de la Reserva: la Reserva Biológica Loma Charco Azul (zona conocida como La Placa) y el Parque Nacional La Gran Sabana.
Artículo 35. La Procuraduría General de la República, a través de la Procuraduría para la Defensa del Medio Ambiente y los Recursos Naturales, en casos de daños causados voluntaria o involuntariamente, a una o varias áreas protegidas, dispondrá las siguientes medidas:
1. Multa desde (1) salario mínimo hasta diez mil (10,000) salarios mínimos vigentes en la fehca en que se cometió la infracción, en función de los daños causados, a la persona física o jurídica que invada, ocupe, destruya, queme, cultive, cace, abra minas, introduzca animales domésticos, construya edificios, casas, caminos o veredas en las reservas científicas, parques nacionales, monumentos naturales y refugios de la vida silvestre.
Vía: Diario Libre