Los Haitises, la cementera y los locos

Cada vez más me doy cuenta de que la mente y la condición humana es muy cambiante.

Eso de hacer una cementera en el Parque Los Haitises ha sido una sorpresa para mí, especialmente porque el que está apoyando esta acción es precisamente Jaime David Fernández.

Pero así son las cosas. Nuestro secretario de Medioambiente, el que por años ha luchado por un país verde, está de acuerdo con esta barbaridad. Y me pregunto, ¿qué está pasando por la mente de este hombre?, ¿qué está pasando con nosotros?, pero ¿será que nos volvimos locos? Desde este Refugio, digo públicamente que estoy en contra de este proyecto y de todos lo que no aporten a la construcción de una República Dominicana mejor, conservada y cuidada.

Para que tengamos una idea de la importancia de este hermoso Parque Nacional, un ambientalista, geólogo y académico dice: “Conforme a los estudios realizados dentro del Plan Nacional de Investigación, Aprovechamiento y Control de Aguas Subterráneas, la región de Los Haitises recibe una recarga anual de mil millones de metros cúbicos de agua, recarga que se acumula en el subsuelo, en forma de reserva de agua dulce subterránea, y que esa reserva representa la garantía de abastecimiento futuro de agua potable para Santo Domingo, San Pedro de Macorís, Monte Plata, Bayaguana, Hato Mayor, Boca Chica y muchas otras comunidades de la región norte de Santo Domingo, y que intentar dañar el ambiente en esa zona es poner en peligro el futuro abastecimiento de agua potable para casi cuatro millones de personas”.

Esta vez no nos quedemos callados, ni sentados en nuestras casas esperando que los funcionarios y todos los que puedan hagan de nuestro país lo que ellos quieran. Es hora de decir ‘basta’ y demostrar que cada centímetro de agua de Los Haitises, cada pececito, cada manglar, ave, insecto, todo es de los y las dominicanas, que nos duele y que estamos hartos de que hagan lo que se les antoje. 

¡Ya basta! Estamos cansados de los que se quieren adueñar de nuestros ríos, de nuestras playas, de los “tutumpotes” a los que no se les puede decir nada, y nos dejan secos, sin árboles, a los que se quieren “robar” Bahía de las Águilas, a todos estos pillos y ladrones, que no hacen más que hacer de nuestro país su beneficio particular. A todos ellos Basta!! Organicémonos, digamos NO, porque mientras estemos sentados en la casa, mirando telenovelas, jugando dominó y bebiendo frías en la esquina, todas estas personas nos dejarán un país destruido.

Por: Sylvana Marte
Listin Diario