LIMA, Perú (AP) — Delegados de más de 190 países aprobaron por unanimidad la madrugada del domingo un acuerdo que pone las bases para un nuevo pacto global que fijará acciones para frenar el calentamiento global.
El borrador fue el cuarto presentado a los negociadores, reunidos dos semanas en Lima al amparo de Naciones Unidas.
Con su aprobación se allana el camino para una reunión similar en diciembre de 2015 en París, en la cual se espera firmar un nuevo acuerdo sobre calentamiento global.
El negociador chileno Andrés Piazzolla dijo en la sesión que el acuerdo de Lima es «efectivo, balanceado y provechoso», pero hizo notar que «los retos de aquí a París no son menores». El delegado brasileño Antonio Marcondes afirmó que ahora los países en desarrollo tienen las bases para negociar un texto consensuado en 2015.
El acuerdo de Lima fue logrado por unanimidad en una sala plenaria en la cual ya no se encontraban muchos delegados, que retornaron a sus países mientras las discrepancias alargaban las sesiones hasta la madrugada.
En unos casos se vio a delegados dormir en la sala de plenarias. Y el delegado de Malasia se quejó hasta en dos oportunidades que debido a las demoras en las negociaciones no pudo viajar a Cusco.
Manuel Pulgar Vidal, ministro peruano del Ambiente, dijo al presentar el borrador, poco después de la 1.00 a.m. (0600 GMT) del domingo, que se elaboró con las sugerencias de todos los delegados, individuales o en bloque.
Tres proyectos previos fueron rechazados mayormente por las naciones pobres alegando que las propuestas iban a favorecer a los países ricos cuando llegue el momento de asumir responsabilidades para combatir el calentamiento global.
La reunión de Lima tuvo el propósito de llegar a este acuerdo que va a permitir a los países formular compromisos.
Pero el procedimiento se complicó debido a que varias naciones en desarrollo alegaron que no se establecía una clara distinción entre lo que esperaban ricos y pobres.
El nuevo borrador ha eliminado esa preocupación.
Claudia Salerno, delegada de Venezuela, pidió de inmediato a la delegación francesa que se abran espacios para las organizaciones sociales, como se ha hecho en Perú.
Grupos ambientalistas conversaron con la AP y criticaron el acuerdo de Lima calificándolo de «muy débil» y «opaco».
Enrique Maurtua, asesor de Climate Action Network, comentó que los delegados aprobaron un texto «muy débil» y recordó que muchos lugares de Latinoamérica «son muy vulnerables y para eso es necesario que exista el financiamiento adecuado en las medidas de adaptación y que se pueda enfrentar el tema de daños y pérdidas».
Mientras Samantha Smith, de World Wildlife Fund, afirmó que «la conveniencia política ganó sobre la urgencia científica. En lugar de liderazgo, entregaron un plan opaco con muy poca relevancia científica».
Los países desarrollados han pedido durante toda la conferencia que los compromisos se centren en recortes de emisiones, mientras que los países en desarrollo también desearon ver compromisos de apoyo financiero.
René Orellana, jefe negociador boliviano dijo que la mayoría de delegados africanos ya habían abandonado la conferencia, y que él también estaba saliendo para el aeropuerto para partir a La Paz en la madrugada.
Las naciones occidentales han sido históricamente las principales contaminadoras del medio ambiente. Actualmente, la mayor parte de las emisiones provienen de los países en desarrollo a medida en que expanden sus economías y millares de familias salen de la pobreza.
El acuerdo de París permitirá establecer acciones de la comunidad internacional para detener el aumento de la temperatura global en 2 grados centígrados hacia el año 2050 con relación a la que existía hace dos siglos, al iniciarse la era industrial.
Vía: El Caribe