La ley que regula el medio ambiente y los recursos naturales, tiene la debilidad de que pese a ser nueva, fue hecha con remiendos de diversas procedencias que al final la han hecho infuncional, según el doctor Jaime David Fernández Mirabal.
El secretario de Medio Ambiente y Recursos Naturales dijo que por eso esa entidad se creó con una serie de subsecretaríaas con funciones sobrepuestas una a las otras, que las convertían en islas independientes, con el resultado que para obtener un permiso, el papeleo tardaba demasiado tiempo.
“Nosotros llegamos ahí con una ley nueva, pero con instrumentos viejos”, dijo el funcionario, al agregar que por ello, al asumir el cargo, recibió del presidente Leonel Fernández la encomienda de trabajar para la obtención de cuatros objetivos.
El primero de ellos fue aumentar la cobertura forestal, en el entendido de que esa es la mejor manera de enfrentar los cambios climáticos.
Al respecto, dijo que se han formado 320 brigadas que trabajan en forma permanente en todo el país tras ese objetivo.
Lo otro era la aplicación cabal de la ley 64-00, que pese a ser nueva con instrumentos viejos “es la que tenemos”.
Otro de los objetivos trazados, fue la creación de una “ventanilla única” que permitiera “reducir el papeleo para obtener algún documento, “porque todavía los trámites son muchos”.
El último de los cuatro grandes objetivos era vincular el accionar de la Secretaría de Medio Ambiente a la sociedad.
El funcionario dijo que la polémica en torno a la instalación de una fábrica de cemento en las proximidades de Los Haitises ha demostrado que el tema de la defensa del medio ambiente y los recursos naturales “tiene dolientes”.
Opinó que todas las ideas expresadas en torno a ese tema indican que la sociedad dominicana ha asumido el tema como propio, permitiendo un monitoreo social permanente a la labor de esa entidad, lo cual ayuda impedir malas influencias en la toma de decisiones.
El doctor Fernández Mirabal expresó sus consideraciones al participar como invitado al almuerzo semanal de los medios de comunicación del Grupo Corripio, donde estuvo acompañado de los subsecretarios, ingeniero Eleuterio Martínez, de Areas Protegidas y Biodiversidad; ingeniera Rosa Urania Abreu, de Proyectos de Mosdernización y Aplicación de Normas; ingeniero Ernesto Reyna, de Gerstión Ambiental; ingeniero José enrique Báez Ureña, director de Quisqueya Verde, y licenciado Mayo Rodríguez, de Comunicaciones.
En su intervención, al ser cuestionado sobre el polémico caso del proyecto de instalación de una fábrica de cemento en las proximidades de Los Haitises, el doctor Fernández Mirabal, dijo que en torno a ese tema hay muchos intereses de diversa índole, desde los sentimentales, a los económicos y los políticos.
Afirmó que en su caso particular, no se puede permitir actuar al margen de sus responsabilidades de Estado, aun cuando, esto pueda tener un costo político.
Al respecto, estimó que sólo puede limitarse a aplicar lo que dice la ley y de acuerdo con ésta, la cementera sí puede operar en ese lugar.
Sin embargo, como ha hecho en otras oportunidades y por obviar influencias, el Gobierno ha decidido obtener la opinión de expertos, en este caso de las Naciones Unidas y se acogerá a lo que éstos establezcan con relación a ese tema, indicó.
Con un dominio perfecto de los temas, el funcionario dijo que en torno a lo relacionado con los recursos naturales, hay demasiados intereses, pero que aplicará la ley independientemente de que quien la viole sea rico o pobre.
El ex vicepresidente de la República consideró que el aumento de la conciencia en torno a temas relacionados con la defensa del medio ambiente, sería su mayor logro.
2000 millones
De pesos, dijo el secretario de Medio Ambiente y Recursos Naturales que se deben invertir para rescatar totalmente la cuenca del río Nizao, donde durante largos años estuvieron operando las granceras.
Por: Emilio Ortiz
El Nacional