La Fundación Progressio celebra su 30 aniversario

Con la melodía de las aves y la brisa que acariciaba los ébanos verdes, la Fundación Progressio conmemoró el vigésimo cuarto aniversario de fundación de la Reserva Científica Ébano Verde y los treinta años de creación de la organización, con la bendición e inauguración de la ermita Ama Guadalupekoa en Tireo Arriba, Constanza.

En una misa de acción de gracias presidida por el obispo de la diócesis de La Vega, Monseñor Antonio Camilo González reflexionó sobre el amor de Dios que, considera, nos hace reconocer el amor al prójimo, e incluido en él, el amor a la naturaleza. A espaldas de Camilo González, los ébanos verdes figuraban una obra plástica de siluetas de montañas y verdor, que dibujaron un ameno ambiente de paz y meditación.

Reserva científica
En la actividad, Enrique Armenteros Rius, presidente de la Fundación Progressio, agradeció a William Reid Cabral y Carlos Reid por el diseño arquitectónico y dirección técnica de la ermita, además de agradecer la entrega y disposición de Ramón Elías Castillo, quien administra la Reserva Científica Ébano Verde.

El 26 de octubre de 1989 a través del decreto No. 417-89, el Gobierno Dominicano declaró como Reserva Científica Ébano Verde un área de 23.1 kilómetros cuadrados, por su diversidad biológica, su importancia hídrica y el elevado endemísmo de su flora y fauna.

Tres mil hectáreas
La administración, protección y desarrollo de la Reserva Científica Ébano Verde, fue puesta a cargo de la Fundación Progressio, sobre la base de un acuerdo de fideicomiso suscrito con la Secretaría de Estado de Medio Ambiente y Recursos Naturales, en aquel entonces Dirección Nacional de Parques. La Reserva cuenta hoy con una superficie de 30 kilómetros cuadrados, equivalente a 3,000 hectáreas.