Una comisión de expertos del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo determinó que no es conveniente la operación de una fábrica de cemento en Gonzalo, Monte Plata.
El estudio de la organización internacional y su sede en el país fue todo lo amplio que hubiera podido desearse, incluidas entrevistas y consultas con centenares de personas del lugar.
Quienes estuvieron a favor y no hagan como Jalisco, que “cuando pierde, arrebata”, no tienen más que releer el informe del PNUD, aceptar que se equivocaron y dar la vuelta a la página.
“Al día” estuvo a favor de que se instalara la cementera en Gonzalo y a esa convicción dedicó cuatro columnas en semanas distintas.
Por supuesto, esa convicción no era hija del experticio de un especialista ni cosa parecida sino de las razones y argumentos que siguen;
-la fábrica no se instalaría en la zona protegida de Los Haitises, una zona
protegida, a pesar de que muchos medios se referían y titulaban “la cementera de Los Haitises”, sino a más de 30 kilómetros de distancia;
(Aquí, término que se escuchaba por primera vez, apareció una “zona de amortiguamiento” que, de acuerdo con ecologistas, multiplicaría por no se sabe cuál número los kilómetros cuadrados de extensión de un área protegida).
-la gente de Gonzalo vería abrirse la oportunidad de trabajar y mejorar sus precarias condiciones de vida;
-el “despotismo ecológico” de que hablaba Rafael Herrera, “de reglamento” y de manera automática, ha sabido oponerse a proyectos de desarrollo económico y social sólo para hacer valer su poder;
-el hecho de que no se mencionara más que dos o tres veces que “Los Haitises” es atravesado por una carretera muy transitada que, como se sabe, es fuente de contaminación del ambiente y severo daño a la ecología.
-como contra la cementera de Gonzalo se armó un movimiento de opinión integrado por ecologistas, “ecologistas” y políticos a la caza de protagonismo, era mejor no confundirse con esa gente;
-hay que establecer reglas claras para la convivencia de la necesidad del desarrollo socioeconómico y la de protección del medio ambiente;
-quizá dio resultado que quienes se oponían a la instalación de la cementera de Gonzalo por creer o hacer creer que operaba en Los Haitises, cuando el gobierno formuló su solicitud al PNUD, trataron de descalificar a algunos de sus especialistas;
Por esto y algunas cosas más, la columna favoreció la construcción y operación de la fábrica del Consorcio Minero Dominicano, empresa que estudiará ahora, o no, la factibilidad económica, la proyección social y el impacto ambiental de otro lugar para establecerla.
Por: Juan José Ayuso
El Nacional