BIGtheme.net http://bigtheme.net/ecommerce/opencart OpenCart Templates
miércoles , noviembre 13 2024
Inicio | :: Articulos | Gobierno acelera el paso para reubicar a Boca de Cachón

Gobierno acelera el paso para reubicar a Boca de Cachón

Web

Se espera que en el corto plazo unas 538 familias pasen a residir en una zona alejada del peligro del lago Enriquillo

La inmensa polvareda, la presencia y movimiento de equipos de un lado a otro y de hombres que permanecen en faena por largas horas en la línea divisoria entre Jimaní y La Descubierta traen aliento a los residentes del distrito municipal Boca de Cachón.En este punto de la provincia Independencia, conocido como El Puente y que une a los dos pueblos, se levantará un complejo habitacional para reubicar a más de 500 familias, parte de las cuales perdieron casas, y a otros pobladores que viven bajo la amenaza constante del lago Enriquillo, que cada día hace suya a una mayor cantidad de terrenos. El trabajo que se observa es intenso y a pesar de que el Ministerio de Obras Públicas carece en su sede de informaciones que permitan conocer claramente en qué consiste el proyecto y su inversión, por estos lados del Sur dominicano la gente común y autoridades municipales coinciden en que se trata de una iniciativa de envergadura. A través del gerente de Comunicaciones se intentó por tres días obtener detalles, pero fue imposible.

Junto a la reubicación, se contempla dotar a los afectados, que perdieron sus predios agrícolas, de una porción de tierra para que realicen alguna actividad agrícola. El censo realizado por el director de la Junta Municipal de Boca de Cachón, Fernando Novas, y otras instituciones indica que en la zona existen unas 538 familias (2,900 personas en total, cuando se calculan los miembros de esas familias). Significa que se requerirá la misma cantidad de viviendas para esa cantidad de familias.

“El levantamiento que se realizó es serio y real, porque queremos presentarle algo correcto al Gobierno. “Queremos que todo se haga bien. No queremos que cuando el Presidente nos visite aparezcan pancartas de disgusto. Lo correcto es que las inquietudes se canalicen. Debemos tomar en cuenta que si una persona no perdió tierra no debe ser incluida cuando se realice la distribución de los predios agrícolas”, sostiene Novas, entrevistado en la sede de la Junta Municipal. En Boca de Cachón se han perdido unas 12 mil tareas como consecuencia del arropamiento de las aguas del lago Enriquillo. Las tierras disponibles para entregar a los afectados son apenas unas 5,000, dijo el director municipal.

Para los trabajos que se realizan en Boca de Cachón, para ambos asentamientos (el agrario y el de vivienda) se han volcado una serie de instituciones que mantienen una coordinación de cerca con la Dirección General de Promoción de las Comunidades Fronterizas, que dirige el mayor general Rafael Emilio de Luna Pichirilo. Con esa institución despachan casi todos los organismos que trabajan para la reubicación en Boca de Cachón, de acuerdo a informaciones obtenidas.

Dominga Recio es la presidenta de la Junta de Vecinos de Boca de Cachón. Desde su punto de vista, el levantamiento realizado para llevar a otro espacio a los afectados de ese distrito municipal estuvo apegado a la realidad. Sin embargo, advierte algunas inconformidades por parte de personas que antes tuvieron casa de concreto y pensaron que las que levantará el Gobierno tendrían esas mismas características. “Las que dará el Estado serán de alucín”, aclara. De la casa de Dominga se alcanza a ver perfectamente una enorme cantidad de árboles amarillentos y con hojas tristes y decaídas, una clara señal de que por ahí el lago Enriquillo hace estragos. Y son precisamente esas señales las que provocan un miedo tan grande en Francisco Díaz, que prácticamente le quitan el sueño.

El agua del lago está a unos 160 metros de la humilde casa de este campesino, amante a sentarse a comer descamisado debajo de un árbol. Francisco tiene razones para temer. “Si en una noche cualquiera se produjeran aguaceros intensos, es probable que mi casa se llene de agua, y sabe Dios si puede ocurrir algo peor”, sostiene.

“Con la edad que tengo soy conforme, estoy dispuesto a lo que sea. Los que tenemos esta edad pensamos en los hijos, en caso de que haya una tragedia”, plantea, mientras consume la última porción de un alimento parecido al mangú de plátano. La zona donde se contempla reubicar a las personas de Boca de Cachón está a unos tres kilómetros, a las afueras de lo que es la comunidad actual. Los números sobre la cantidad de asentamientos agrícolas que se harán en la provincia Independencia varían, tomando en cuenta que el lago ha afectado a otras comunidades, no solo a Boca de Cachón.

El gobernador provincial, Vianey Medina, dijo a elCaribe que no conoce con exactitud la inversión que se hará para reubicar a Boca de Cachón. Lo que sí dejó claro es que en El Espartillar se han ubicado unas 35 mil tareas para limpiarlas, de las cuales unas 18 mil se han desmontado. Citó el proyecto de El Limón, donde se está limpiando otra cantidad de terrenos y enumeró también el proyecto Cantón, ubicado en Duvergé, en la sección de Las Baitoas. “Se cuenta ya con el permiso medioambiental para limpiar ese proyecto. Ahí se sembrará mango y aguacate”, sostuvo.

De manera extraoficial, este diario se enteró de que el presidente Danilo Medina podría visitar esta semana, quizás el miércoles o el jueves a Boca de Cachón, y de paso ofrecería ahí una serie de informaciones que no ha sido posible obtener a través del Obras Públicas.

Danilo ha mostrado gran interés por zona afectada

Danilo Medina en los últimos tiempos ha visitado dos veces la zona bajo influencia del lago Enriquillo. Una de ellas fue cuando era candidato presidencial (Partido de la Liberación Dominicana), y la otra visita fue el 15 de octubre de 2012. En esa última ocasión el jefe del Estado llegó sorpresivamente en horas de la tarde a las comunidades afectadas por la crecida del lago.

El mandatario, contrario a las acostumbradas hileras de vehículos que tradicionalmente acompañan a los mandatarios, se movilizó en dos yipetas Toyota Prado, color negro, vidrio oscuro y placa privada, acompañado de una comitiva de ocho personas, entre ellas el director del Instituto Agrario Dominicano (IAD), Radhamés Valenzuela, y  su jefe de seguridad, mayor general Adams Cáceres Silvestre.

Dos protestas para pedir agilidad en los trabajos

Si bien en las comunidades afectadas por los estragos del lago Enriquillo tienen la esperanza de que el Gobierno resolverá con colocarlos en un mejor lugar, tampoco se han quedado de brazos cruzados a esperar que esa medicina llegue. Al Palacio Nacional han llegado por lo menos dos protestas de campesinos en la gestión de Danilo Medina. Una de esas manifestaciones se produjo el 12 de enero de este año.

Las personas se colocaron en el lado occidental de la casa de gobierno y portando pancartas, expusieron la situación por la que atraviesan al quedarse sin tierra donde cultivar o pastorear el ganado de subsistencia. Para entonces el reclamo incluía, además, que se reubique el mercado binacional que se da entre haitianos y dominicanos.

Conocen la problemática

Dominga Recio
Presidenta junta de vecinos
“Además de la junta de vecinos, aquí tenemos la Asociación de Desarrollo, de los Derechos Humanos, el Centro de Madres y el Comité de la Juventud. Aquí los trabajos se hacen coordinados y tenemos la presencia siempre del general De Luna Pichirilo, que enlaza bien a las instituciones que trabajan del lado oficial”.

Fernando Novas
Director Junta Municipal Boca de Cachón
“Tengo casi tres años al frente de la junta municipal, la cual también tiene tres vocales. En principio, cuando se hacía el levantamiento sobre los daños por el lago, querían dejarme fuera. Ahora hacemos un trabajo más coordinado donde y sin exclusión. Yo mismo he estado al frente del censo.

Francisco Díaz
Residente en Boca de Cachón
“Por aquí perdimos la agricultura, uno no sabe de qué vivir ahora. El Gobierno está trayendo unas funditas, pero todos sabemos que eso no es suficiente. Con una fundita de arroz que dan quincenalmente nadie vive. Aquí en Boca de Cachón casi todos teníamos nuestra parcelita, ahora quedamos desamparados”.

Vía: El Caribe