El Gobierno chino declaró hoy que el número de osos panda salvajes ha llegado a los 1.800 ejemplares en el país asiático y que deja de ser una especie “en peligro” para convertirse en “vulnerable”.
Cui Shuhong, director del Departamento de Protección Ecológica del Ministerio de Ecología y Medio Ambiente, explicó en una rueda de prensa que “se han mejorado las condiciones de vida de algunas especies raras” como los osos panda, los antílopes tibetanos o los ciervos del padre David, una especie nativa de China.
El nivel “vulnerable” es el quinto en la escala de especies en peligro de extinción tras extinto, extinto en estado salvaje, en peligro crítico y en peligro.
Cui también mencionó el aumento de población de otras especies en peligro como los tigres y leopardos siberianos o el ibis nipón.
El Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) ya había ajustado en 2016 a “vulnerable” el estado de amenaza de los osos panda, y declaró que existen 1.864 ejemplares en el mundo.
El hábitat natural de los plantígrados se limita actualmente, según WWF, a seis zonas montañosas repartidas en las provincias chinas de Sichuan, Shaanxi y Gansu.