Denuncian que una empresa contamina en Los Alcarrizos

Por: Mairobi Herrera

Asma, bronquitis, dolores de cabeza, salpullido, alergia visual y de la piel son algunas de las enfermedades que según comunitarios de 17 barrios del sector Los Alcarrizos padecen tras la contaminación que alegaron produce la empresa Proenergéticos ubicada en la zona franca de ese lugar.

Los moradores tienen en su poder dos resoluciones del Ayuntamiento de Los Alcarrizos que ordenan el cese de las labores de la fábrica a consecuencia de sus quejas. Sin embargo, la empresa señaló que trabajan de manera legal y que tienen todos los permisos necesarios.

La compañía Procesos Energéticos Industriales (Proenergéticos) se dedica a la recolección y procesamiento de aceite reciclado derivado del petróleo para venderlo. Su producto final llamado Mex Diesel se utiliza en calderas y quemadores, según explicaron las autoridades. En tanto, personas de los barrios Los Americanos, Coquito, La Unión, Los Álamos, Pradito I y II, Los Patos, La Compuerta, Villa Balaguer, Villa Colina Los Patos, Tamarindo, La Parcela, Eucalipto, Margarita Cedeño, Alcarrizo II, La Fe y La Esperanza, denunciaron que la empresa está contaminando el ambiente.

Indicaron que Proenergéticos al procesar los aceites expide un mal olor que inunda a las comunidades aledañas, provoca enfermedades que atacan el aparato respiratorio, los ojos y la piel.

Reclamo
Felícita Campusano Soto, de la junta de vecinos Amor y Fe, dijo que la fábrica desde 2007 ha afectado a su comunidad y que los vecinos siempre han presentado la queja a las autoridades. “Nunca las autoridades han tomado cartas en el asunto”, expresó Campusano.

Carmelo Álvarez, del barrio Villa Balaguer, dijo que tiene cuatro años visitando hospitales por problemas pulmonares y que más que su salud, le ha generado una pérdida económica significativa el tener que comprar todos los medicamentos para su tratamiento.

“Queremos que cierren esa planta, porque habemos muchos afectados aquí. Las autoridades no hacen nada porque parece que el infeliz no tiene derecho a vivir”, manifestó. Jorge Ramírez, dirigente de la Coordinadora de Organizaciones Comunitarias para el Desarrollo de Los Alcarrizos (Codela), advirtió que si la empresa hace su producción sin contaminación que afecte a los residentes, ellos no tienen ningún problema.

Empresa
El gerente y propietario de la compañía Proenergéticos, Luis Disla, señaló que los comunitarios han realizado esa campaña sólo para poder invadir sus terrenos que corresponden a 182 tareas.

Explicó que la empresa es una de las pocas tierras en la zona que tiene su título y que no van a permitir que les invadan, además de que tampoco quiere venderle. El empresario indicó que trabajan de manera legal y que tienen el permiso de Medio Ambiente No. 0724-08, con el cual operan.

Dijo que periódicamente reciben visitas de técnicos del Departamento de Calidad del Ministerio, quienes supervisan sus actividades.

Mientras, José Manuel Piña, ingeniero encargado de producción, señaló que han tenido reuniones con la junta de vecinos y regidores y que llegaron al acuerdo de sellar la laguna que están en el terreno de la fábrica, la que generan el mal olor que denuncian comunitarios.

LA POSICIÓN DE MEDIO AMBIENTE
El Ministerio de Medio Ambiente señaló que la empresa Proenergéticos, tiene toda su documentación al día y que el último informe que realizaron no indica ningún tipo de contaminación.

Exhortó a las comunidades que hagan su denuncia ante la Dirección de Protección del Viceministerio de Gestión Ambiental, para que los técnicos visiten la empresa y hagan el levantamiento correspondiente.

En ese sentido, el director de Protección Ambiental del Ministerio, Francisco Flores, indicó que el permiso que tiene la empresa es por daños ambientales relacionados con agua, aire, tierra y daños a la salud. Aseguró que en otro tipo de permiso ellos no tienen que intervenir.

“Si el ayuntamiento emitió su resolución, ellos tendrán sus motivos y tienen el poder judicial para actuar”, afirmó.

Mientras Faustino Lami dijo que “yo soy comunitario y vivo ahí. El olor que arroja la fábrica tiene su momento y molesta como cualquiera, pero eso no es siempre”.

Vía: Listín Diario