Todos los días, desde hace alrededor de tres meses, decenas de camiones transportan del lecho del río Yuna y sus alrededores, cientos de toneladas de materiales, utilizados en un relleno que realiza la empresa minera Barrick Gold.
Cada día, apenas despunta el alba, palas mecánicas y tractores comienzan el trabajo de llenado de los vehículos pesados, en una jornada de trabajo que produce el trasvase de arena, piedras y cascajo, bajo la supervisión del ingeniero Juan Rodríguez, quien se identificó como encargado de operación.
Se trata de un constante movimiento de camiones que van y vienen, transitando por un estrecho camino, de incómodo acceso, distante a unos cuatro kilómetros de la comunidad de Maimón.
Redactores de El Nacional que visitaron ayer la zona, pudieron constatar la extracción de los materiales, tanto de una franja del lecho del río, como de sus riberas.
Aunque el ingeniero Rodríguez estimó que del lugar salen cada día alrededor de 50 camiones repletos, vecinos de la zona aseguran que diariamente son movilizados hasta 140 de esos vehículos.
Varios hombres, ubicados en lugares estratégicos del angosto camino, tienen la aparente misión de dirigir el tránsito, especialmente cuando se aproximan camiones en vías contrarias. Rodríguez, al dar a conocer que llevan un poco más de dos meses extrayendo los materiales, explicó que esa labor podría extenderse por otros seis meses, dependiendo de la prontitud con que se movilicen los operarios de los tractores y palas mecánicas, así como los choferes de los camiones.
Se supo que una empresa constructora que tiene su sede en el Distrito Nacional es la que tiene la responsabilidad de extraer los materiales, tras la firma de un contrato con los ejecutivos de la Barrica Gold.
En el preciso momento en que los periodistas recababan datos sobre el retiro de la arena, piedras y cascajo del lecho del río Yuna y sus alrededores, llegaron al lugar ejecutivos de la compañía capitaleña, a bordo del helicóptero matrícula N406TR, quienes permanecieron por corto tiempo en aparente supervisión de los trabajos que se llevan a cabo.
Se supo que los materiales son extraídos, fundamentalmente, de unos predios propiedad de Julio Canela, mientras que Paco Abréu, quien dice ser dueño de una porción de tierra colindante con el lecho del casi desaparecido río Yuna, tras alegadamente comprarla a una sucesión, espera que pronto los aparatos comiencen a extraer materiales del lugar.
Por: RICARDO RODRIGUEZ ROSA
El Nacional