A pesar de las denuncias y advertencias de ambientalistas, siguen “destruyendo” los manglares en la Laguna Saladilla.
Temprano en la mañana, a pocos metros del paso fronterizo, un grupo de obreros y equipos pesados trabajan para “rellenar” un muro que podría causar un “ecocidio” para uno de los refugios silvestres más extensos en el país.
Un refugio natural que está protegido por la Ley 64-00 sobre Medio Ambiente y Recursos Naturales, la Ley Sectorial de Áreas Protegidas, 202-04, así como por acuerdos internacionales, ente los cuales está el Ramsar.
Restan aproximadamente dos kilómetros más de extracción y relleno para la construcción del muro fronterizo en la parte cercana a Monte Cristi, informó un supervisor de la obra en aquella zona protegida.
Mientras, Frank Valenzuela, presidente del Centro Bahía de Manzanillo para el Desarrollo Regional (CEBAMDER), denunció una devastación de miles de metros lineales de manglares.
“Han dividido los manglares, no les va a entrar agua”, dijo Valenzuela, tras indicar que se ha “destruido” y se va a secar el resto de la laguna si el Ministerio de Medio Ambiente no interviene.
Recientemente, a través de un comunicado, la Academia de Ciencias de la República Dominicana (ACRD), expuso sobre el impacto de la construcción del muro, lo que realmente cuesta, es justamente la eliminación de ese relleno que divide en dos el humedal y limita el flujo de agua a través de él.
Según Nelson Bautista, director de la Fundación “Acción Verde”, de no buscarse una alternativa, en pocos años esta área protegida desaparecerá, gran parte del manglar morirá y lo demás será depredado por los haitianos.
“Básicamente se han limitado a creer que con colocar un número equis de alcantarillas la situación se subsana; y podrían estar muy equivocados”, dijo Bautista.
Dado el caso, son varias las sugerencias de parte de instituciones y ambientalistas para darle continuación al paso fronterizo sin afectar el humedal.
La Academia de Ciencias destacó que las técnicas de la ingeniería moderna, brindan un abanico de opciones para construir vallas o barreras físicas menos lesivas al medio ambiente y sus recursos, e incluso, más económicas que un muro de varilla y cemento.
“Lo correcto sería eliminar ese tramo innecesario de muro, visto que el manglar en sí mismo es un muro verde, infranqueable, que con algo de vigilancia y tecnología sería manejable”, expresó Bautista al respecto.
De igual manera, el presidente de Cebamder sugiere que allí se implemente un proyecto turístico o corredor ecológico.
“De la vista gorda”
Las fuentes coinciden en que la construcción del muro se ha hecho sin ningún estudio de impacto ambiental previo y no se está llevando la supervisión necesaria.
Al respecto, Valenzuela dijo que estas acciones han sido “permitidas” y que el Ministerio de Medio Ambiente se hace “de la vista gorda”.
“Esas son sus funciones y debería estar velando para que eso no ocurriera”, aseguró el ambientalista.