P. Profesor ¿de qué se ocupa la Convención Ramsar?
R. Desde que la humanidad despertó ante su realidad ambiental, en los años 70 del siglo pasado, la Convención Ramsar fue uno de sus primeros aciertos en materia de conservación de la naturaleza y la casa donde habita nuestra especie. Hasta entonces los seres humanos vivían en diferentes países, pero no tenían conciencia de que todos habitaban en un mismo mundo, en un mismo hogar y que disponían de unos mismos recursos que tienen que alcanzar para todo, mientras la vida sea una realidad sobre el planeta Tierra.
Fue el 2 de febrero de 1971, antes de la Primera Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente Humano (Estocolmo, 1972), que un grupo de países preocupados por el hábitat de las aves migratorias, se reunieron en Ramsar, un poblado Iraní, con el propósito de adoptar medidas locales pero con alcances globales, que permitieran la conservación de los grandes humedales del planeta, donde la avifauna de ultramar descansa a lo largo de su periplo transoceánico.
Hoy se cumplen 40 años de la primera convención destinada a la conservación de un ecosistema específico sobre el planeta: los humedales. A estas alturas, ya son 160 naciones las que han firmado el convenio, incluyendo a la República Dominicana, que entramos en el 2002 (30 años después), al crearse el primer humedal de importancia internacional de la Isla La Española, el Lago Enriquillo que pasó a ser el 1,178 en la lista de Sitios Ramsar.
Actualmente el país espera el reconocimiento de la Laguna Cabral como nuevo “Sitio Ramsar”, mientras prepara la propuesta para tres nominaciones más: Humedales del Ozama, Humedales del Parque Nacional Jaragua y Humedales del Bajo Yuna. Todas estas propuestas tienen que llenar unas fichas y ser sometidas a procesos evaluativos por parte de la Secretaría General Ramsar, para determinar si reúnen los méritos suficientes para ser considerada y merecer tal distinción.
En estos momentos el país está celebrando los 40 años de la Convención Ramsar con múltiples acciones, siendo la más importancia la apertura del Centro de Protección y Vigilancia de la Laguna Aurelio (Haina), mientras se refuerza la vigilancia en múltiples humedales que vienen siendo rescatados en todo el territorio nacional, como los humedales del Ozama, Boca de Nigua, Bajo Yaque del Sur, Las Malvinas, Laguna Prieta (Santiago), Estero Hondo, Bajo Yuna, Monte Cristi, Bávaro y Hoyo Claro, entre otros.
Via: Hoy Digital