Combate y consecuencias de los incendios forestales

Lo cierto es que han llovido las opiniones sobre el incendio forestal que afecta a Valle Nuevo, que no es el primero. En el año 1983 hubo otro gran incendio en este mismo lugar, y es una zona donde con frecuencia se provocan pequeños incendios por trabajos agrícolas.

Los manejos de los incendios forestales deben tratarse técnicamente, no con una simple opinión, por ejemplo recae la responsabilidad en el Ministerio de Medio Ambiente utilizar y preparar los equipos necesarios para contrarrestar los mismos. Muy pocos estamos acostumbrados a los incendios forestales de gran magnitud; en los grandes países, Estados Unidos, Colombia, Venezuela, Italia, Francia, Grecia y por último Brasil, que es el número uno en incendios forestales, afrontan grandes dificultades cuando se presentan incendios de gran magnitud, a pesar de su desarrollo y experiencia.

Siempre hay, y debe haber equipos técnicos para controlar los incendios forestales que el 98% de los mismos son provocados por el hombre. Generalmente, los incendios se producen donde hay una densa vegetación y en periodos de sequía.

Contrarrestar los grandes incendios forestales conlleva muchos recursos humanos, técnicos y económicos, y a hay que tener mucha actitud y aptitud.

Tres casos básicos: 1- Los incendios pueden ser intencionados, provocados por el hombre, que es la gran mayoría de los casos. 2- Accidentes y negligencias, aquí caen ciertos trabajos agrícolas, la quema de basura, las colillas de cigarrillos, fogones improvisados, entre otros. 3- Naturales, son los menos frecuentes, pero aquí hay quienes los provocan, y luego fabrican el rayo.

Los incendios tienen tres fases básicas: Inicio, propagación y extinción.

Los incendios pueden ser de subsuelo, y se propagan en materia orgánica, de manera lenta por la falta de oxigeno; de superficie, que se propaga por las hierbas, arbustos y la resina de estos últimos, madera podrida, hojas y árboles secos. – Y el fuego de copas, que se da en la copa de los árboles, y se transmite de unos a otros.

Las consecuencias de los incendios forestales son funestas, lamentablemente hay quienes no tienen ni el mínimo de los escrúpulos para provocarlos. Los incendios afectan la flora y fauna directamente, muere una gran cantidad de especies endémicas, y ni hablar de la gran cantidad de arboles que desaparecen. Luego de esto se producen también grandes cantidades de plagas que afectan otras áreas y productos agrícolas, y se convierten en la base para la eliminación de los ríos de nuestro país.

Todos tomamos agua, exigimos agua, y no podemos vivir sin ella, pero pocos nos preocupamos por conservar los ríos, y después decimos que la culpa la tiene el Estado. Los incendios forestales, aparte de los daños a la flora y fauna, afectan significativamente la salud de la población. Son un foco de enfermedades respiratorias, cáncer de pulmón, y terminan alterándoles la presión arterial a las personas sin importar la edad.

Entiendo que antes de emitir críticas erradas o no, debemos organizarnos y dar apoyo, a través de los organismos que luchan por la conservación de nuestro ecosistema.

Vía: http://www.diariolibre.com/