«Se dice que en este prometedor año se definirá una mina de oro en
territorio sanjuanero». Entiendo Sr. Presidente la importancia para usted de
desarrollar el pueblo que lo vio nacer. Sin embargo, el área donde se halló
el «milagro» representa las inmediaciones del pulmón del país: el Parque
Nacional José del Carmen Ramírez. El seno de los más importantes recursos
acuíferos; el parque donde hay cierto Pico cuyo nombre acordamos enaltecer
este año. Un área del país donde aún no muere la jutía y donde los puercos
cimarrones no están del todo extintos.
Explotar en La Escandalosa, Jengibre, La Bestia o cualquier otro lugar donde
se han otorgado exploraciones mineras prometiéndonos un avance industrial,
mejores ingresos y más empleos, no compensa. No compensa si tenemos que
abandonar el sueño de nuestra provincia como atractivo turístico, si se deja
de proveer 80% de la producción nacional de habichuelas; no compensa si
tenemos que ver morir nuestros ríos y enfermar nuestros hijos.
Aunque el Sur se quede estancado en el atraso y la pobreza, déjenos Sr.
Presidente con la tierra que hemos cultivado durante 500 años y el río que
siempre nos ha acompañado. Porque siendo usted sanjuanero como yo, sabe que
preferimos quedarnos con nuestra dignidad, aunque sea lo único que tengamos.
Vía: Diario Libre
Sarah, este es una petición muy justa, estoy de acuerdo. Ya está bueno de que sigamos cambiando nuestro oro por espejitos. En buen lenguaje popular, más vale la sal que elchivo´´.