CAMPEÓN DE CAMPEONES

Un ministro de Medio Ambiente que afirma que el aguacate no es un vegetal ni entiende la importancia del bosque nublado en la captación y regulación de las aguas solo es superado por otro que es capaz de confesar que él no autorizará, bajo circunstancia alguna, la eliminación de cultivos en áreas protegidas como establecen las leyes 202-2004, 64-2000 y la Constitución de la República.

Peor que cualquiera de los anteriores es un ministro que lamenta, con su voz quebrada, que productores de cebolla y “vegetales” hayan decidido no sembrar o prefieran migrar a la siembra de aguacate en áreas protegidas.

Pero mucho peor que todos los anteriores es aquel que proclama que el Ministerio que dirige no tiene autoridad sobre las áreas protegidas y, por lo tanto, se preocupa más por las compensaciones que por los delitos ambientales.

Mucho, mucho peor aún es un ministro que desconoce de manera absoluta las funciones de su cargo, ignora aspectos básicos, no comprende los informes que el propio Ministerio publica y presenta cifras sin lógica ni sentido.

Pero el peor de todos es el que se presenta incoherente e irascible antes país, evidencia su prepotencia y, envalentonado, hace gala de sus defectos.

En realidad, el peor de todos los posibles ministros es el que reúne todas las “virtudes” anteriores juntas, el campeón de campeones: Ángel Estévez, Ministro de Medio Ambiente y Recursos Naturales.

Luis Carvajal