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Octubre de 2023 marca el 37 aniversario de un acontecimiento que marcó un hito en República Dominicana en términos de conservación de especies y ecosistemas marinos a través de la creación del Santuario de Mamíferos Marinos Bancos de La Plata y de La Navidad, uno de los primeros espacios de esta categoría a nivel mundial y que se alza como el área protegida marina de más grande del país, con 3,3451.63 kilómetros cuadrados.
Situado en la costa norte del país, surge el 14 de octubre de 1986 con el decreto 319 emitido por el expresidente Joaquín Balaguer. En ese año, la bióloga marina Idelisa Bonnelly y otros colegas nacionales y extranjeros impulsaron el establecimiento del Santuario.
El primer santuario para ballenas jorobadas creado en el Atlántico Norte fue ampliado 10 años después hasta la bahía de Samaná y con la Ley Sectorial de Áreas Protegidas 202-04 el espacio fue elevado a reserva científica.
La «Guía Ecoturística del Sistema Nacional de Áreas Protegidas» destaca que para llegar a la zona se puede acceder a cualquier puerto de la costa dominicana, pero a la vez detalla que el puerto de Samaná es una zona ideal para la salida de embarcaciones hacia la bahía. Agrega que en caso de salir hacia el banco de La Plata es adecuado hacerlo por el puerto de Puerto Plata.
La presencia de las ballenas jorobadas (Megaptera novaengliae) durante enero y abril no es el único atractivo del área protegida ya que el manatí antillano (Trichechus manatus) y los delfines nariz de botella (Tursiops truncatus) son otros mamíferos que pueden ser avistados en la zona.
El santuario también es hábitat para tres especies de tortugas amenazadas: carey (Eretmochelys imbricata), tinglar (Dermochelys coriacea) y verde (Chelonia mydas). Referente a los peces, se pueden observar aquellos que son de arrecife como el pargo (Bodianus cyanopterus), jabón (Rypticus saponaceus) y peces loro (Scarus vetula), además de otras especies como los abisales y bentónicos.
El área protegida marina más grande del país es el hogar de centollas (Mithrax spinossimus), la langosta espinosa (Panulirus argus), el lambí (Strombus gigas), entre otras especies marinas.
El decreto que creó el área protegida destaca que Banco de La Plata es un hábitat «único y crítico» para las poblaciones de ballenas jorobadas que llegan a la zona
Un complejo de arrecifes
La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), en un artículo descriptivo sobre el área protegida, cita los arrecifes de coral y manglares del santuario como otros objetos de conservación de gran valor.
«Estos ecosistemas son fundamentales para la sostenibilidad de las poblaciones de peces y crustáceos y por tanto para la supervivencia de los mamíferos marinos que habitan esta zona marino costera», reza la publicación de la agencia de Naciones Unidas.
Los fondos marinos que integran el santuario tienen áreas coralinas de hasta casi 100 metros de profundidad, además de fondos fangosos y rocosos, de acuerdo a la Guía Ecoturística de Áreas Protegidas, en la que sus autores califican el Banco de La Plata como una terraza arrecifal, resguardada al norte por un extenso arrecife del que afloran montículos de coral.
Entre los corales que pueden ser observados en la zona la publicación cita el Acropora cervicornis, Acropora palmata, Porites porites, y Millepora spp, también octocorales (un coral blando que se sitúa en las coberturas del fondo marino) como el Plexaura spp y Gorgonia spp.
Amenazas
En 2022 la Autoridad Nacional de Asuntos Marítimos (Anamar), institución dedicada a la investigación y conservación de los recursos vivos y no vivos del mar, lanzó un informe sobre el estado de los arrecifes del Banco de la Plata, en el que también participó la Fundación Dominicana de Estudios Marinos (Fundemar) y que arrojó el serio peligro en que se encontraban los arrecifes del santuario.
El levantamiento mostró arrecifes dominados por algas entre 10 y 30 metros de profundidad, con una cobertura coralina viva menor de 12 % y con comunidades de corales y peces con una riqueza de especies pobre.
El estudio cita como principales razones de este deterioro el blanqueamiento de coral por el aumento de temperaturas, producto del cambio climático, la sobrepesca, en especial de especies vedadas como el pez loro, enfermedades y el aumento de fuerza y frecuencia de los huracanes.
Algunas medidas para mitigar el deterioro del espacio, presentadas en el informe, abarcan la elaboración de un plan de manejo y monitoreo y control de las pesquerías furtivas en el Banco.
Arqueología e investigación
Sumergidos en el Santuario de Mamíferos Marinos Bancos de La Plata y de La Navidad están decenas de embarcaciones procedentes de la época colonial hasta la actualidad.
Los expertos citan ejemplos como los galeones Nuestra Señora de Guadalupe y La Tolosa en la bahía de Samaná (1724), el barco de guerra francés Scipión, también en la entrada de la citada bahía y el barco del pirata Bannister, Golden Fleece (1686) o el pecio del Nuestra Señora de la Limpia y Pura Concepción (1641) en el banco de La Plata.
Además de su riqueza cultural, el santuario ha formado parte de iniciativas de cooperación internacional para la conservación de cetáceos. Un ejemplo reciente es el registrado a principios de marzo con el Tercer Congreso Mundial de Ballenas Jorobadas, cuya sede fue República Dominicana.
El encuentro concluyó con la formalización de una red de cooperación en la que participan representantes del santuario dominicano, además de especialistas de Guadalupe, Francia, Canadá, Estados Unidos y Países Bajos.
