La agencia gubernamental que vela por la Gran Barrera de Coral australiana anunció el viernes que degradó las perspectivas de los corales de “malas” a “muy malas” debido al calentamiento de los océanos.
El informe de la Autoridad del Parque Marino Gran Barrera de Coral, actualizado cada cinco años, es una mala noticia para la pintoresca red de corales de 345.400 kilómetros cuadrados frente a la costa nororiental de Australia, afectada por el cambio climático, que blanquea los corales.
El informe sostiene que la mayor amenaza para el arrecife sigue siendo el cambio climático. Las otras amenazas están relacionadas con las construcciones en la costa, los desechos cloacales y la pesca ilegal.
“Las medidas globales significativas contra el cambio climático son cruciales para desacelerar el deterioro del ecosistema y el futuro valor del arrecife y sustentar su recuperación”, dice el informe. “Tales medidas complementarán e incrementarán en gran medida la eficacia de las acciones de la autoridad local del Arrecife y su zona de captación”.
Éste es el tercer informe de la agencia que registra el deterioro del arrecife desde 2009.
Según la agencia, las amenazas _que incluyen las estrellas de mar corona de espinas que se alimentan de los pólipos corales_ son “múltiples, acumulativas y crecientes”.
“La acumulación de impactos a lo largo del tiempo y en un área cada vez mayor reduce su capacidad de recuperarse de los trastornos, lo cual afecta a las poblaciones e industrias que dependen del arrecife”, dijo el presidente de la autoridad, Ian Pointer. “La perspectiva general para la Gran Barrera de Coral es muy mala”, añadió.
Un estudio sobre el blanqueado de los corales en el arrecife, publicado en 2017 en la revista científica Nature, halló que el 91% del arrecife sufrió al menos un blanqueo durante tres eventos en las últimas dos décadas, el más grave en 2016. Un cuarto evento de ese tipo se produjo a fines de 2017, después de la publicación del estudio en Nature.
El Comité de Patrimonio Mundial de Naciones Unidas expresó su preocupación ante el blanqueado en 2017 y el informe del jueves podría tener como consecuencia que la UNESCO clasifique como “en peligro” a la maravilla natural incluida en su lista del Patrimonio Mundial.
La ministra de Ambiente, Sussan Ley, dijo que no le sorprendía la degradación del estado del arrecife en vista de los daños causados por ciclones y episodios de blanqueo en años recientes.
Dijo que su gobierno “construye resistencia en este importante arrecife global” y cumple sus compromisos con París de reducir las emisiones de gases de invernadero en 26% a 28% por debajo de los niveles de 2005 para 2030.
“Quiero destacar que es el arrecife mejor cuidado del mundo”, aseguró.
La Gran Barrera de Coral es el sistema de arrecifes coralinos más grande del mundo. Todos los arrecifes del mundo sufren los efectos del calentamiento de los océanos.