La Fundación Ambiental Mundo Ecológico Inc. denunció que en los ríos Camú, en La Vega, y Yuca, en Bonao, se está cometiendo un crimen ecológico con la extracción de materiales de manera ilegal a todas horas.
Cecilio Herrera, presidente de la fundación, dijo que los depredadores de esas afluentes actúan ante la mirada indiferente de las autoridades correspondientes.
Herrera manifestó que como consecuencia de la explotación indiscriminada, los citados ríos han disminuido sus caudales de manera drástica.
“Los ríos languidecen, han perdido sus cauces, se están secando, el agua escasea, se han formado cuevas y cuando llueve esos ríos se desbordan”, enfatizó.
Puntualizó que hay una tala descomunal, con el movimiento de suelo, en el caso del río Yuna donde hay dos retroexcavadoras para extraer materiales.
Asimismo, informó que ese afluente está represado con una pila de material y quienes extraen materiales han desviado su cauce.
El presidente de la Fundación Ambiental Mundo Ecológico pidió la intervención del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales para que los ríos Camú y Yuna no sigan siendo depredados.
También pidió al Servicio Nacional de Protección Ambiental (SENPA) que realice una inspección a esos ríos para que los problemas denunciados, que definió como muy graves, sean corregidos.
En ese orden, el ambientalista se mostró preocupado por los daños ecológicos que se vienen materializando Camú y Yuna, en franca violación a la Ley de Medio Ambiente.