Ecologistas en Acción señala como «resultados decepcionantes» las negociaciones mantenidas en Ginebra como antesala a la COP15 de Biodiversidad que está previsto se celebre en el tercer trimestre de 2022 en Kunming (China) y exige que pérdida de biodiversidad se califique como «crisis ecológica».
Delegados de 196 países, la comunidad científica y representantes de la sociedad civil se han reunido entre el 14 y 29 de marzo en Ginebra para establecer acuerdos de cara a la última parte de la Cumbre de las Naciones Unidas sobre la Diversidad Biológica (COP15) de finales de este año -la primera parte se celebró en la misma ciudad en octubre de 2021- para detener la pérdida de biodiversidad.
Ecologistas en Acción califica el borrador redactado en las reuniones de Ginebra como «decepcionante» e «insatisfactorio» , según ha expuesto en un comunicado, y, además, exige que, a pesar de la «reticencia de algunos países», se defina a la situación actual como «crisis ecológica», en consonancia con lo firmado en la Declaración de Kunming firmada en 2021.
El ‘Marco Global Post-2020’ es uno de los documentos negociados en Ginebra que tiene el objetivo de «impulsar a los Gobiernos y a la sociedad» a adoptar medidas «urgentes y transformadoras» con proyectos de cara a 2030 y a 2050 a través de 21 Metas de acción específicas.
Desde la entidad han reconocido «algunos avances», pero han reivindicado que el presente borrador «sigue sin abordar las causas reales de la pérdida de biodiversidad» tales como el crecimiento económico «ilimitado», el consumismo, la «producción insostenible», la «responsabilidad» de las grandes corporaciones y el «exceso de confianza» en la tecnología como «solución a los problemas».
Entre los puntos más destacados, la ong subraya que la solución a la crisis climática «debe estar basada en la reducción de emisiones y no en la instrumentalización de la naturaleza», al referirse a las soluciones basadas en la naturaleza.
La organización ha condenado el «excesivo peso» que reciben las grandes corporaciones para la definición de políticas de biodiversidad y ha alegado que el actual acuerdo puede dar lugar a que «los gobiernos pidan a las empresas que se autorregulen e informen sin supervisión ni control externo».
Por ello, llama a actuar sobre las causas directas de pérdida de biodiversidad, «eliminando las subvenciones a empresas y sectores que causan destrucción medioambiental».
Entre sus exigencias, también se encuentra la «prohibición absoluta» de la explotación minera en los fondos marinos y la creación de una nueva Meta sobre género -que fue iniciativa de Costa Rica y tuvo el apoyo de solo once países, pero no salió adelante – para «garantizar igualdad» a las mujeres y niñas en la toma de decisiones y la formulación de políticas.
En definitiva, Ecologistas en Acción concluye que el borrador acordado en Ginebra puede resultar «demasiado abierto» por la falta de tiempo para su debate y la «escasa voz» otorgada a los representantes de la sociedad civil; por ello, «dependerá en exceso» de lo que se negocie en la segunda parte de la COP15 de Kunming a finales de 2022.
La ong llama a la ciudadanía y el movimiento ecologista a trabajar conjuntamente para reclamar a sus representantes políticos unidad y contundencia para evitar el colapso de los ecosistemas.