Una de las primeras imágenes de la misión europea Copernicus Sentinel-5P, de la Agencia Espacial Europea (ESA), pone de manifiesto la alta contaminación atmosférica de Madrid. El satétite, que registra el dióxido de nitrógeno (NO2), muestra una gran mancha sobre la capital. También contempla altas emisiones en el valle del Po en el norte de Italia y en el oeste de Alemania.
Lanzado el 13 de octubre, el satélite Sentinel-5P ha publicado este viernes sus primeras vistas de la contaminación del aire que afectan al continente europeo, en lsas que destacan los focos de España, entre otras regiones.
Los picos de dióxido de nitrógeno (NO2) en el aire son la causa de las recientes restricciones de tráfico acordadas por el Ayuntamiento de Madrid.
Según los estudios epidemiológicos a los que hace referencia la OMS, los niveles elevados de este contaminante pueden provocar irritación en los pulmones y una mayor incidencia de enfermedades respiratorias. Son especialmente vulnerables los niños, las personas de avanzada edad y los que ya tienen problemas respiratorios, como asma o enfermedad pulmonar obstructiva crónica. Además, las concentraciones de NO2 registradas actualmente en ciudades europeas y norteamericanas están asociadas a una disminución del desarrollo de la función pulmonar en la población infantil.
El NO2 está «causado principalmente por el tráfico y la combustión de combustibles fósiles en procesos industriales», recuerda la ESA. La agencia europea destaca que el Sentinel-5P lleva «el sensor más avanzado de su tipo hasta la fecha: Tropomi», que permite cartografiar contaminantes como «el dióxido de nitrógeno, el metano, el monóxido de carbono y los aerosoles, todos los cuales afectan el aire que respiramos y a nuestro clima».
Josef Aschbacher, director de Programas de Observación de la Tierra de la ESA, destacó que este satélite es el sexto del programa de monitoreo ambiental Copernicu, pero el primero dedicado a monitorear la atmósfera. Sus resultados han sido revelados por el Centro Aeroespacial Alemán DLR, que procesa los datos recogidos por el Sentinel-5P.
Además de las imágenes del continente europeo, la misión tiene un ancho de franja de 2.600 kilómetros, subraya la ESA, lo que permite dar vistas de todo el planeta cada 24 horas.
El Diario